lunes, 27 de septiembre de 2010

Lope, la película

Este fin de semana me he animado a ver esta película. Tenía un poco de recelo porque, como ocurre en muchos casos de ambientaciones histórico-literarias, algo queda que te deja insatisfecho. No quiero olvidarme de que el cine es un negocio y que la recreación fiel puede estar reñida con los fines crematísticos.
Y eso podría ocurrir en esta película sobre la figura del dramaturgo que revolucionó las tablas de los corrales de comedia en el siglo XVII. El guión ha recreado solo los tormentosos amoríos entre Lope y Elena Osorio, y entre el poeta e Isabel de Urbina. Nos estamos refiriendo a sus años juveniles, nada más. Son muchas más las mujeres que se le conocieron; incluso cuando ya había entrado en el sacerdocio.
Bien es verdad que estas relaciones dan bastante de sí como para crear un argumento atractivo para el cine que reporte buenos dividendos en taquilla, e incluso pueda aspirar a conseguir algún premio en certámenes internacionales. Esta película puede ser una excepción en este sentido.

La ambientación, los decorados y el vestuario son buenos; te introducen en la época y en el Madrid del XVII. La interpretación de los actores no les va a la zaga. Me parece especialmente meritoria la de Leonor Watling, que encarna al personaje de Isabel y que efectivamente fue raptada por el escritor. El papel del empresario teatral Jerónimo Velázquez está dignamente encarnado en el actor Juan Diego, y es quien ayuda a dar a conocer el talento teatral del joven Lope, a pesar de defender la propuesta teatral contraria a la de su compañía.
La cinta tiene ritmo y contribuye a difundir las distintas facetas del escritor, la literaria cuando escribe los requiebros amorosos del marqués hacia Isabel de Urbina, a quien ya le ha echado el ojo el propio Lope; la amorosa, a través del triángulo amoroso con Elena e Isabel; y la de aventuras, entrenado como estaba por su ejercicio militar.
Creo que voy a recomendársela a mis alumnos. Retrata con claridad la creatividad arrolladora de Lope, sus ideas innovadoras en el teatro, su afición a las mujeres...y porque entretiene.

2 comentarios:

Eloísa dijo...


La pasada noche tuvimos la acertada idea de ver esta película en familia. Y creo que nos gustó a todos. Lope es retratado como todo el personaje que fue, una fuerza de la naturaleza, y más allá de los múltiples escarceos amorosos, la película logra transmitir el cambio –más bien la revolución- que su obra va produciendo en el teatro y cómo todos se rinden ante él.
Y a lo largo de la cinta nos va regalando con algunos de sus sonetos, hasta llegar a ese “Desmayarse, atreverse, estar furioso…” con el que cierra la película. Todo el claroscuro del barroco para expresar las contradicciones del amor. Una preciosidad.

Eloísa dijo...

Volviendo a mi amado
siglo XVII , he encontrado un soneto precioso de Lope “Ir y quedarse” , lleno también de contrastes, que nos habla de la ausencia. Sería un placer escucharlo recitado en su voz.